viernes, 7 de noviembre de 2008

Nota 244. LA RENOVACIÓN POLITICA Y EL SINDROME SARLI

CONVENCIÓN PROVINCIAL

El único modo que nuestro paso por la Convención Provincial de la UCR no sea una parodia es que, además de aportar experiencia y conocimiento (que a lo mismo estábamos obligados sin ser miembros), luchemos por la renovación de las prácticas y de la propia dirección política y consigamos resultados. Es que hace 25 años eramos Convencional Nacional y no habla bien que ahora reiteremos "silla" en un escalón "formalmente" inferior. Solo ideas innovadoras nos redimirán de la reincidencia.
Nuestra generación debe producir las condiciones para el traspaso por que mucho ha ocurrido en el entorno y se necesitan nuevas perspectivas. Con ideas de cómo producir esa renovación llegamos cuando varios están pensando o postulando relecciones. Y enfrentando viejas prácticas que nos avejentan más y consolidan un orden naturalmente conservador. El conservadurismo es una construcción social que incluye el anquilosamiento de nuestras prácticas independientes del ideario.
Tenemos suficientes recursos humanos para nuevos actores conforme a nuevas circunstancias. Se trata de no vivir de las rentas de nuestro pasado político sino de la agregación de valor permanente y la generación y promoción de nuevos cuadros. Llevamos proyectos pero teniendo conciencia de nuestra realidad. Tendremos éxito si al final no nos creemos imprescindibles o que solo se puede sobrevivir con "manija".
Nosotros entramos a la militancia con Alan Jones como líder de la Fórmula 1 y Reuteman como eterno y molesto 2. Con la selección de Juan Carlos Lorenzo que desataba los sueños de un niño de potrero (Maradona). Sanguineti ni figuraba en la política uruguaya, tampoco Lula en Brasil, Felipe Gonzales iniciaba sus acciones publicas en España y no conocíamos un nombre como el de Tabaré Vazquez o Bachelet.
Nuestros "ratones" pasaban por los pechos de Isabel Sarli en las películas permitidas por la dirección fascista del cine. En algunos casos, con prácticas reiteradas, ya somos tan grotescos como si Coca Sarli aspirara a participar del baile del caño en "bailando por un sueño". Con esa conciencia vamos por una participación honrosa en la Convención Provincial y con el propósito de una renovación con ideas para nuevas y mejores camadas. Y lo mismo seguiremos despuès desde otros frentes y seguramente nuestro Partido, mejor.
Por ahora vamos a impulsar la pronta organización del Instituto de Formación Política y Gremial y su financiamiento. Esta será una de las palancas para estimular una renovación con calidad y no burocratizada.
Un cupo generacional para las candidaturas de las próximas 3 elecciones y un principio de no relección excepto las ascendentes y para los electos por este régimen. Para vincular esa renovación con los desafios de la sociedad del conocimiento, un sistema de aprovechamiento y promoción de las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones y de relevamiento de becas y promoción de becas de formación y capacitación nacionales e internacionales y de pasantías en los bloques legislativos en sus tres dimensiones (provincial, nacional e internacional). Que la Franja Morada tenga un delegado a la Convención Provincial por universidades nacionales con sede en la Provincia y representación en el Comité Provincial y de distritos en las ciudades sedes de universidades o facultades. Que sean miembros natos de la Convención Provincial los Consejeros Superiores no estudiantiles de las Universidades mencionadas. Y todo aquello que hace a evitar los peligros de un Partido conservadora y burocratizado en donde las consignas progresistas son solo un recurso de argumentación. Si tenemos éxito en estos propósitos estaremos en línea con las viejas luchas. Es que ésta y para esto no es menor que aquellas cuando el ambiente es de más temor que deseos del cambio o la tentación de vivir de las rentas de nuestra historia.
Como la señora Sarli no va a bailar en el caño que nosotros abandonemos las líneas y sistemas organizados bajo el principio del macho alpha. Por eso impulsamos eso que llamamos Punto de Encuentro Radical. Es que el Partido es la institución.

1 comentario:

Oscar Delgado dijo...

Una buena visión progresista, Ricardo. Un cuadro de consejeros que delega la custodia de los fundamentos partidarios a una nueva dirigencia nutrida en escuelas de formación, es un verdadero punto de encuentro